Es verdad que la situación que estamos viviendo es compleja y que necesitamos medidas claras y decididas, que resulta fundamental las soluciones conjuntas, en nuestro caso no solo internas sino de los países de la Unión Europea, pues la crisis va más allá de los problemas de un país, dado que está afectando a la mayoría de los países Europeos, ciertamente en diferentes dimensiones, pero sin duda la afectación de uno se traslada a los demás, de ahí la importancia de creerse Europa como solución. Es verdad que en España en general tanto los ciudadanos como los diversos gobiernos hemos tenido un claro sentido Europeísta.
Charlando hace unos días con un amigo, le comentaba mi opinión, que no va más lejos que la de un puro observador, que procura reflexionar, además lógicamente de mi propia responsabilidad como político, como diputado autonómico, pues bien como digo, le trasmitía mi preocupación por la situación que estamos viviendo y mostraba mis dudas sobre las decisiones sin duda necesarias que llevan a tomar medidas restrictivas, de apretarse el cinturón, pero que yo creía que a la vez se debería de intentar buscar un equilibrio e incentivar las inversiones productivas, pues sino el mero ajuste podría llevar a una etapa excesivamente prolongada de parálisis, con las correspondientes consecuencias, tales como paro y recortes en las políticas sociales, que evidentemente afectan a todos, pero sobre todo a los más desfavorecidos. Por eso mostraba mis dudas, de preocuparse excesivamente de los ajustes y olvidarse de buscar paralelamente medidas de dinamización de la economía.
Por otra parte no deja de llamarme la atención, los cambios rápidos, que han adoptado tras las últimas elecciones generales algunos y no me refiero solo a la complacencia que ya comienza a atisbarse entre los responsables del P.P., que antes reivindicaban con fuerza y sin descanso ante el gobierno socialista, me refiero también a entidades no políticas, que eran claramente reivindicativas y comienzan a mostrar su comprensión ante los retrasos que se anuncian tanto en infraestructuras, como en otros compromisos en nuestra comunidad y en nuestra provincia.
Quiero pensar que por ejemplo si el AVE y el corredor mediterráneo, antes eran fundamentales para dinamizar la economía de nuestra provincia, sería difícil de entender que ahora no sea tan urgente, luego lo que pido a este nivel es coherencia y ser capaces de priorizar y que las decisiones que se tomen estén en consonancia con las necesidades reales de los ciudadanos.
No hace mucho nos reuníamos en Castellón para reivindicar el corredor mediterráneo, nada ha cambiado, para que no sigamos pidiendo esta necesaria infraestructura, pues si no fuera así algunos deberían dar explicaciones y claras. Por una parte lógicamente el P.P., pero también aquellos que parece que en la actualidad se muestran tan comprensivos.
La situación actual no es muy diferente de la de los últimos tiempos y por lo tanto es difícil de justificar un cambio en los compromisos que se adquirieron hace tan solo unos días y espero que no se intentes justificar recortes sociales.
En nuestra comunidad hace tiempo que el P.P. sigue esperando para tomar decisiones y hay que recordarles que tienen la obligación de gobernar, da la impresión de que están esperando a que alguien tome las decisiones por ellos.
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