No ganamos para sustos. No contentos con todos los problemas con los que tenemos que lidiar todos los días que, además, nos llegan las sorpresas para sobresaltarnos más, como consecuencia de las noticias, algunas de ellas nada deseadas, sino todo lo contrario.
Me estoy refiriendo, lo habrán supuesto Uds., al tema económico de la Unión Europea y más concretamente al rescate de Grecia, el desasosiego de la Sra. Merkel y del Sr. Sarkozy, en especial, por los últimos acontecimientos que pueden arrastrar a España, entre otros países, y esto es lo que nos faltaba, independientemente del color político que gobierne en nuestra nación a partir del 20-N.
Ni todo lo que reluce es oro ni está el horno para bollos. Hay líderes europeos que aparentemente buscan salvar su propio pellejo y el de su país, obviamente. No pongo ejemplos, No es necesario. Esto no es defender a la Europa de la Unión sino a una nacionalidad concreta y sus estamentos económicos.
En cuanto a España, dicho sea de paso, siempre con buena voluntad y amplia capacidad conciliadora, fuimos a por lana (soluciones factibles), a la reciente reunión en Bruselas, y salimos trasquilados (mayor exigencia a España por parte de la Unión).
Para colmo, se ha producido el cambio en la dirección del Banco Central Europeo, cuyo nuevo responsable es el Sr. Mario Draghi quien va a seguir una línea continuadora del polémico Sr. Jean-Claude Trichet. Sr@s, que la Macarena nos ampare.
Y como colofón del circo que se ha montado, el anuncio de que el 2012 será, si cabe, peor que el presente 2011, ya que prácticamente no habrá crecimiento.
Se están dando todos los requisitos para que se organice una y buena, la tormenta perfecta.
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