IGNACIO SUBÍAS Mediterráneo, 29-01-2013
Seguro que recuerdan ustedes
aquella película de ET, donde el protagonista señalando con el dedo y hacia el
espacio soltaba la famosa frase de “ mi casa “. Pues bien yo creo que desde el
P.P. debieron de asumir esa parte de la película y la interiorizaron de tal
forma, que cuando les ha llegado el momento de gestionar lo público y sin duda
junto con una gran prepotencia, a pensar que pueden hacer lo que quieran sin
consecuencias, confunden lo público con lo suyo y por lo tanto son capaces de
llevar decisiones adelante, que podemos tildar en ocasiones de esperpénticas,
lamentables y de hasta un cierto desprecio.
Es evidente que me estoy
refiriendo entre otras a una de las últimas actuaciones que hemos vivido, con
claro sonrojo, ciertamente como consecuencia de una casualidad al acudir un
grupo de parlamentarios Socialistas al Aeropuerto de Castellón y observar como
estaba siendo utilizado por un coche de carreras.
No solo estamos ante una
utilización inadecuada de una Instalación, esperamos que en un futuro cumpla
las funciones de un aeropuerto, si no ante una decisión ajena a toda lógica,
imprudente, desafiante y que desde luego demuestra una forma de hacer las
cosas, ajena a los intereses públicos y que nuevamente pone en entredicho las
actuaciones que se llevan a cabo en nuestra Comunidad, sin ningún control. Pues
la Generalitat dice que no sabía nada. En cualquier caso esto demuestra una vez
más ese sentido de apropiación y esa confusión que se produce en el P.P. con lo
público, como si fuera suyo y no de los ciudadanos..
En fin un lamentable espectáculo
del que no se han dado las explicaciones exigibles en una situación como esta.
Lamentablemente se podían poner más ejemplos de actuaciones del P.P. en las
Instituciones cargadas de oscurantismo, falta de información y participación,
negación de documentación a la que se debiera de tener derecho y todo ello en
nombre de su mayoría, escudándose en que los ciudadanos se la han otorgado y es
verdad, que la tienen, pero una vez más hay que recordarles que en Democracia
los ciudadanos otorgan la capacidad para gobernar, pero en ningún caso para
hacer lo que se quiera y desde luego debe de haber unos mecanismos de control y
de explicación permanente, tanto para los que gobiernan como para la oposición,
que deben de rendir cuentas todos los días a los ciudadanos de sus acciones,
cuyo fin evidentemente debe de ser intentar mejorar la calidad de vida de las
personas..
Hoy no puedo acabar este artículo sin comentar el
grave problema de la deuda y los impagos de la Generalitat Valenciana, que a
tantos colectivos, empresas, asociaciones, personas e instituciones ( como
Ayuntamientos ) están poniendo en riesgo con gravísimas consecuencias. En
defensa de los intereses de los ciudadanos y del funcionamiento de los
Ayuntamientos, que recuerdo son las instituciones más cercanas, las que mejor
conocen y resuelven los problemas de sus ciudadanos, se encerraron durante 24
horas Alcaldes Socialistas de la provincia de Castellón en la sede del Consell,
pidiendo al presidente Fabra que “ pague ya “. Fue un acto de valentía,
generosidad y de defensa y supervivencia de los puebles y ciudades. Mi
reconocimiento para quienes defendieron los derechos de todos.
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