IGNACIO SUBÍAS Mediterráneo, 10 - 07 - 2012
El copago o repago de los
medicamentos ya está en marcha. A pesar de todos los argumentos en contra que
hemos puesto sobre la mesa, basados en que se afecta a principios de equidad y
solidaridad, haciendo recaer el peso de la medida fundamentalmente sobre
aquellos colectivos más desfavorecidos, pues bien al P.P. les ha dado igual y
han continuado tomando medidas claramente ideológicas aprovechando la actual
situación y que sin duda supondrá una clara regresión en derechos ciudadanos.
Ya he comentado en otras
ocasiones que la incompetencia de los gobiernos del P.P., que llevan 17 años
gobernando, la vamos a pagar todos y que poco a poco se están cargando el
sistema sanitario público. Los primeros días de éste repago, han producido incertidumbre
en la gente y muchas situaciones anómalas, que ha llevado a aplicar criterios
provisionales ante la falta de certidumbre de lo que se ha de hacer.
Ha habido múltiples errores, pues
se ha aplicado a muchos ciudadanos varemos diferentes a su situación real
actual, como consecuencia de cambios de la misma, así pensionistas, personas
que en la actualidad están en el paro o con rentas diferentes a las que se les
está aplicando. Ante los diversos problemas el ministerio tuvo que poner en
marcha una audioconferencia para intentar poner en común las múltiples
discrepancias que estaban ocurriendo en las diversas comunidades autónomas. Sin
duda todo ello se produce además de porque son medidas injustas e ineficientes
son como consecuencia de la falta de diálogo y de reflexión, de unas medidas
que han sido precipitadas. El P.P. una vez más buscando soluciones han creado
más problemas.
Es lamentable que no sepamos
todavía el coste de la puesta en funcionamiento de éstas medidas, que sin duda
será elevado. Cuando uno no sabe hasta donde serán capaces de sorprender los
representantes del P.P., leo unas declaraciones del Conseller de sanidad que
curiosamente tras 17 años de gobierno de su partido, en una muestra bien de
sinceridad o de estar absolutamente sobrepasado, dice que las administraciones
sabían que el nivel de gasto no era viable, pero que los gobiernos decidieron
no hacer caso de éste tipo de informes, porque si hubieran hecho caso hubieran
podido perder elecciones y por eso se quedaron en un cajón.
Cualquier análisis meramente
reflexivo sobre éstas declaraciones, producen una tremenda rabia y
preocupación. Si sto fuera así, estamos ante una tremenda irresponsabilidad,
por parte de los que así actuaran, pues parece evidente que decidieron que no
les importaba el posible deterioro de las cuentas públicas y sus consecuencias
posteriores e hicieron predominar los intereses de su partido y los electorales
muy por encima de los intereses de los ciudadanos. Amén evidentemente de otro
tipo de posibles responsabilidades. Todo ello debiera hacer reflexionar a
quienes así han actuado y desde luego debieran de asumir sus responsabilidades
como mínimo políticas ante los ciudadanos, pues están aceptando que eran
conscientes de que no era posible seguir con la política que estaban llevando,
pero no les importo y ahora como consecuencia justifican los recortes en
derechos que pagaremos todos los ciudadanos. Pero al parecer para ellos lo
importante era ganar elecciones, al coste que fuera y no solucionar los
problemas de la gente.
Consecuencias de estas actitudes, pues medidas ideológicas, privatizaciones, recortes, subidas de impuestos, recortes salariales e ir cargándose el sistema sanitario público.
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