IGNACIO SUBÍAS Mediterráneo, 9-04-2013
Cumplir con los compromisos
adquiridos con los ciudadanos, no es un acto de voluntarismo, ni se puede
justificar su incumplimiento como ha hecho en varias ocasiones el presidente
del gobierno esgrimiendo que no ha cumplido con sus compromisos, pero si con
sus obligaciones. Pues no, cumplir los compromisos es una obligación, porque en
caso contrario se habrá engañado a los ciudadanos y hasta se puede haber
cometido lo que podíamos denominar un fraude electoral.
Hago esta introducción, porque
estos días leo el enfado con el señor Rajoy y el gobierno central, por la
renuncia a construir un segundo túnel de salida de la estación ni la ejecución
de una variante que asegure la doble plataforma. Quisiera recordar un artículo
que escribí hace unos meses, donde ya indicaba mis tremendas dudas por la
posición del gobierno central del P.P. y los problemas que iban a surgir si se
llevaba adelante el tercer carril, pues esta solución era absolutamente
insuficiente de futuro y por lo tanto se debía de exigir el ancho Europeo y las
reformas necesarias en la estación de Castellón, que posibilitara tanto la
conexión mediante el AVE, como para el fundamental corredor Mediterráneo que
supone una plataforma de desarrollo básico para nuestra economía.
Pero los políticos del P.P. tan
reivindicativos ellos cuando no gobiernan, son absolutamente sumisos a los
designios de su superioridad, cuando están gobernando, como sucede en la
actualidad tanto a nivel Autonómico como Central. De qué sirvieron aquellas cumbres
de alcaldes del Mediterráneo, una de ellas celebrada en Castellón, con la
presencia del señor Bataller y el presidente Fabra, donde hasta firmamos los
presentes, para que se llevaran a cabo estas infraestructuras que ahora se nos
niegan.
Si no presionan, permitirán que la estación de
Castellón se convierta en un cuello de botella y como dice Ximo Puig sea una
estación de tercera. Espero que a parte de declaraciones, sin contenido y sobre
todo sin voluntad real de incidir sobre el gobierno central, sean y seamos
capaces de poner por delante los intereses de Castellón.
Los incumplimientos no se quedan
solo en las infraestructuras. Donde queda el famoso victimismo, tan utilizado
en otros tiempos. Cómo es posible que la reivindicación de una necesaria y mejor
financiación para nuestra Comunidad, se quede en palabras que no suelen ir
acompañadas de ejercicios reales de presión hacia el gobierno central y ahí
nuevamente debemos de estar todos juntos, pues es mucho lo que nos jugamos,
independientemente de que el gobierno Autonómico podía poner mecanismos propios
para mejorar los ingresos, mediante una política fiscal diferente, para la que
tiene capacidad.
No quisiera terminar, sin recordar los incumplimientos
en materia de infraestructuras sanitarias, en compromisos tales como el famoso
plan “ construyendo salud “, plan que nadie les obligó, se supone que se
basarían en estudios de planificación sanitaria, que aconsejaría realizar
dichos centros, porque de no ser así, el tema sería más grave todavía. Bien conocemos
en Castellón los citados incumplimientos, recordemos el Hospital de Vall de Úxo
( más de 10 años comprometido ), el poco recordado hospital socio sanitario de
Peñíscola o los centros de salud de La pobla de Benifasar, Vinaroz, Peñíscola,
Alcala, Oropesa, Onda o Rabal Universitario de Castellón. No se puede prometer
para contentar y no cumplir y a eso hay que pedir explicaciones y
responsabilidades.
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