URBANISMO PARA TODOS

AMPARO MARCO                    Mediterráneo, 12-09-2012

El Ayuntamiento de Castellón se ha visto obligado por la Justicia a exponer al público, por tercera vez, el Plan General de Ordenación Urbana. El Tribunal Supremo entendió que el equipo de gobierno municipal, del Partido Popular, no había cumplido la ley como tocaba y vulneró los derechos de la ciudadanía a expresar su punto de vista sobre el desarrollo urbanístico.

Esa circunstancia supone un serio correctivo a los anteriores alcalde y concejal de Urbanismo, Alberto Fabra y Javier Moliner, que han huido de la institución y nos han dejado el urbanismo patas arriba. Castellón está sufriendo las consecuencias de muchos años, demasiados, de prepotencia y gestión ineficaz.

Pero si algo positivo puede sacarse de este gobierno caótico del PP es que los castellonenses tendrán una oportunidad de participar de forma activa en la definición de un nuevo modelo de ciudad. Los socialistas de Castellón hemos defendido que este sería el momento idóneo para abordar un nuevo PGOU, más ajustado al actual tiempo de la economía. La crisis ha paralizado a la construcción y los daños al sector serían mínimos, por no decir nulos. Pero el PP no ha querido.

Los cambios son posibles y necesarios. El Plan General del 2000 se concibió con criterios especulativos y en pleno auge de la burbuja inmobiliaria. Ahora no responde a las demandas de una situación económica deprimida, a la que es preciso combatir desde todos los ámbitos de la acción política, también desde el urbanismo.

Todos y todas tenemos el derecho, y también en parte la obligación, de participar en este nuevo Castellón. Podemos aportar nuestra visión de ciudadanos de a pie sobre la ciudad que queremos. Es el momento de expresar que otro urbanismo es posible, un urbanismo para todos, sin exclusiones y guiado por el interés general.

Los socialistas de Castellón aprovecharemos esta oportunidad y expondremos nuestro punto de vista sobre el desarrollo de una ciudad del siglo XXI a través de la presentación de alegaciones, como ya hicimos en el pasado. El futuro de Castellón está en nuestra mano. No dejemos que otros nos impongan su modelo de ciudad. Actuemos, participemos, gobernemos.