AMPARO MARCO Mediterráneo, 06-03-2013
Castellón se reencuentra estos días con su historia y lo
hace con la emoción de vivir la fiesta en la calle para calmar el triste
panorama de la crisis. Si el tiempo no lo impide, la Magdalena volverá a ser
una oportunidad para que los castellonenses demostremos nuestro carácter
abierto e integrador. Desde esta tribuna me gustaría aprovechar la ocasión de
invitar a los amigos de la provincia, y de más allá, a visitar la capital,
donde les recibiremos con los brazos abiertos y con el ánimo de disfrutar
juntos un tiempo de alegría compartida.
Pero la Magdalena no solo es ‘orgull de genealogia’, también
es ‘orgull de futur’. Es una oportunidad enorme para Castellón. La fiesta debe
ser un impulso económico de primer orden. Desde el Ayuntamiento debemos
trabajar, gobierno y oposición, para remarcar el gran potencial de promoción de
la ciudad que tienen las fiestas fundacionales. Los socialistas estamos
convencidos de que todos los esfuerzos que se hagan en ese sentido tendrán una
respuesta más que satisfactoria.
Los
castellonenses vivimos nueve días de fiesta, pero no dejamos de lado los
problemas, no podemos olvidarnos de ellos. Castellón merece compensar la
amargura de los malos tiempos con la energía que nos aporta cada año nuestra
Magdalena. Somos una gran ciudad con afán de progreso y el futuro sigue estando
a nuestro alcance.
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