AMPARO MARCO Mediterráneo, 27-03-2014
Son días de fiesta. Castellón hace un paréntesis en el
día a día para echar la vista atrás y rememorar la historia de la ciudad. Es la
ocasión para darnos cuenta de lo que nuestros antepasados lucharon para que hoy
tengamos un presente pleno, pero, sobre todo, una gran oportunidad de futuro.
Solo por eso, la Magdalena es un gran motivo para la celebración.
Castellón se abre a la provincia, a la Comunitat, al país
y a todo el mundo. Estamos orgullosos de recibir a amigos y visitantes que
quieren disfrutar con nosotros de este tiempo de felicidad. Es emocionante ver
cómo bulle la ciudad, cómo se llenan las calles, cómo la música y la pólvora
inundan hasta el último recodo.
Son días en los que nos sentimos orgullosos de ser lo que
somos. La Magdalena es una ocasión para darnos cuenta de nuestra fortaleza como
ciudad. Y esa fuerza es la que debemos proyectar el resto del año para impulsar
un nuevo futuro, más próspero y solidario para todos, pero en especial para
quienes peor lo están pasando por culpa de la crisis.
Debemos ser capaces de avanzar en ese camino de futuro
con la fuerza de la ciudad que ahora se expresa en forma de fiesta colectiva.
Cuando la música y la pólvora callen, será la ocasión de seguir creciendo como
ciudad. Tenemos grandeza, energía, fuerza y voluntad. Entre todas y todos,
seguro, lo conseguiremos.
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