IGNACIO SUBÍAS Mediterráneo, 03-09-2013
He pasado alrededor de una semana
fuera y nada más regresar me he seguido encontrando con noticias claramente
relacionadas con los efectos de los recortes que está aplicando el P.P.
La publicación en la página Web
del ministerio de sanidad de la evolución de las listas de espera, refiriéndose
a datos de diciembre del 2012, han producido una cierta alerta. Quisiera
recordar que desde el P.Socialista llevamos tiempo denunciando tales hechos y
pidiendo soluciones. Pues bien si han resultado preocupantes los datos de
diciembre del 2012, no les quiero contar las listas que tenemos en junio del
2013, pues los efectos de los recortes se han agudizado durante este año y por
lo tanto se han disparado las esperas de los pacientes. En nuestra Comunidad a
los múltiples recortes de personal, infraestructuras, sustituciones,.. se une
la desaparición del plan de choque, por el que se intervenían más de 33.000
personas al año. Plan que fue eliminado con el falaz argumento de que los
pacientes serían intervenidos en el sistema público sin necesidad de
incrementar recursos, evidentemente era imposible, tal y como se ha demostrado.
Este incremento de las esperas (
hay pacientes en la Comunidad que esperan más de un año ), son fruto de una
ineficaz e ineficiente gestión y de los tremendos recortes llevados a cabo, que
producen un sistema dual, pues quien se lo pueda pagar no esperará y se
intervendrá en la privada y quienes no puedan deberán de asumir las esperas a
las que hubiere lugar. Por so las listas de espera suponen una ruptura de la
equidad del sistema y de las diferentes circunstancias en las que los
ciudadanos puedan enfrentarse a sus problemas, en este caso sanitarios, en
función de sus posibilidades económicas. A esto están llevando las políticas de
recortes y privatización del P.P., que están rompiendo la universalidad, la
equidad, la solidaridad y la calidad del sistema sanitario, ejemplo hasta hace
poco y deteriorándose lamentablemente como consecuencia de las políticas del
P.P.
Mientras tanto el señor Fabra y
el gobierno Valenciano, son capaces de gastar 300.000 euros en un partido de
baloncesto o casi 1.300.000 euros en un programa de formación docencia sobre
prescripción de medicamentos, pensando una vez más en el ahorro, pero no en la
calidad, en fin dos ejemplos más
lamentables de incapacidad para priorizar.
No puedo terminar éste artículo,
sin comentar que hace ahora un año, se iniciaron las medidas de exclusión de
ciudadanos del sistema sanitario, incidiendo sobremanera en los inmigrantes que
denominaban sin papeles, pero también sobre Españoles. En una decisión injusta,
insolidaria, y carente de los valores que debe de tener una sociedad y con
repercusiones sanitarias para la salud de las personas, tanto desde el punto de
vista de la atención individual como desde el punto de vista de la salud
pública, ante la falta de control en ciertas enfermedades sobre todo infecciosas.
El P.P. debe de rectificar y
eliminar medidas que tomaron que suponen una ruptura social.