IGNACIO SUBÍAS mediterráneo, 20-08-2013
Tal y como comentaba en mi artículo de la semana pasada, hay
muchos que parece que no se enteran de lo que está pasando y si lo hacen,
todavía sería peor las consecuencias que se puedan sacar dadas las decisiones
que dicen que hay que tomar, caso del Fondo Monetario Internacional o el
responsable de economía de la Comunidad Europea o la CEOE, que aconsejan
cada vez medidas más restrictivas y de recortes, cuando en éste País se lleva
tiempo recortando y afectando a derechos y a condiciones de vida de todos, pero
sobre todo de los más desfavorecidos.
Pero si la situación global es compleja y acabo de llegar de
diversas zonas de nuestro País, donde se nota que lo están pasando mal y con
escasas esperanzas de mejorar a corto plazo y créanme que son Comunidades cuyas
tasas de paro por ejemplo son claramente inferiores a las nuestras. Pues bien,
cuando surgen comentarios sobre las diversas situaciones en los sitios donde
vivíamos, cuando llegaba el turno de nuestra Comunidad, la gente estaba
perpleja.
Se preguntaban ¿cómo es posible lo que está pasando? Recuerdo cuando hace años la gente veía nuestra Comunidad como un lugar con
unas perspectivas envidiables, con bajas tasas de desempleo y una economía
aparentemente boyante. Pero además del desplome económico, llama la atención el
descalabro social y ético. Todo el mundo y eran personas de ideología
diferente, no lograban entender el deterioro que ellos observaban, como
consecuencia de las actitudes de los responsables del P.P. en la Comunidad y
preguntaban por muchas de las cosas que aquí ya estamos malacostumbrados a
hablar de ellas, tales como el
importante número de imputados o que qué pasaba con el accidente del metro y no
entendían como responsables políticos se negaban a responder y a dar
explicaciones a los ciudadanos o que pasaba con la Fórmula I, donde ahora se
nos pide al Gobierno Valenciano una cantidad al no celebrar la carrera o
preguntaban hasta por el campo de fútbol del Valencia y evidentemente sobre el
tema del Aeropuerto de Castellón o de la Ciudad de la Luz y no entendían nada y
sobre todo que nadie asumiera responsabilidades.
La gente está enfadada y nos está pidiendo a los políticos
respuestas. El alejamiento de la política entre otras razones viene por hechos
como los que he comentado, que no se pueden entender y menos en una situación
como la actual. Es evidente que hay que cambiar las actitudes, las formas y
sobre todo las respuestas a los problemas reales de los ciudadanos.
El P.P. en nuestra Comunidad está siendo incapaz de dar
respuestas políticas, sociales, económicas que se correspondan con las
expectativas y necesidades de la gente. Quienes están exigiendo explicaciones,
están rechazando el oscurantismo, además de la incapacidad y la incompetencia.
El mensaje de los ciudadanos va para todos, pero es
evidente que quien gobierna y lo ha hecho durante tantos años en nuestra
Comunidad, tiene máximas responsabilidades y lamentablemente no se enteran.